Vuelve el mismo frío. Y con él
nuvole bianche
una mattina
desde mi casa
por las calles empedradas
me acompañan.
Dulce el frío
como cadencias
entre las notas, y más notas
entre cadencias
que en dos mil cuatro compuso
Ludovico, premonitorio,
para nosotros;
para estos verso
cansados
que te consumen.
Vuelve el frío
ma questa volta
tú ya no estás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario